Se ha hablado y se sigue hablando mucho de la "mochila austríaca" como sistema excelente y beneficioso para todos: empresarios y trabajadores. El resumen que siempre se hace es que es un "fondo" que acompaña al trabajador y al que tiene acceso si es despedido, con lo cual agiliza la movilidad laboral (liberando a la empresa de una indemnización) mientras que el trabajador queda protegido ante eventuales casos de despido. En círculos liberales es un sistema muy aclamado.
Hay más información en este reciente post en la web del Instituto Juan de Mariana. Está bastante bien explicado, aunque sólo de forma teórica y parcial. Ayer le dejé un comentario con mi experiencia y opinión que (no sé muy bien por qué razón) no ha sido publicado, mientras que hay otro más reciente que no aporta nada que sí fue publicado.
Vivo en Austria y conozco de primera mano este sistema. De hecho, ya he dispuesto de ese dinero una vez cuando se me acabó un contrato (luego verán por qué). Hablemos claro de cómo funciona, sin chorradas ni florituras.
- Cada trabajador dispone de una cuenta asociada en una denominada "Vorsorgekasse", que se podría traducir como "Caja de contingencia" o "Hucha para los apuros". Existen varias, y casi todas son sociedades anónimas privadas. Aquí hay una lista y más información (en alemán).
- Como trabajador, tu empresa está obligada a contribuir mensualmente un 1,53% de tu sueldo a tu cuenta, la "mochila", gestionada por una de esas cajas. Como se puede leer en el folleto (en inglés) de una de ellas, tu dinero lo utilizan para invertir en lo que les apetece. La mía en concreto el año pasado envío un email diciendo que había sido con creces la mejor de toda Austría, porque había conseguido un 2,89% de rentabilidad para sus clientes.
- Cumpliendo determinadas condiciones, tras un despido o fin de contrato, puedes disponer de todo el monto del dinero acumulado hasta el momento si quieres. Si no, lo seguirán invirtiendo por ti y podrás disponer de él cuando te jubiles.
- La mochila austríaca es despido libre. A cambio de esa pequeña contribución obligatoria a "la mochila", a las empresas les cuesta lo mismo despedir a un trabajador que lleve 6 meses en la empresa que 20 años: nada. Tampoco tienen que justificar la causa del despido. Esta es la pura definición de despido libre: echar a quién se quiera cuando se quiera sin coste ni explicación alguna. Si esto es bueno o malo no entro, pero las cosas por su nombre. Yo he presenciado personalmente cómo han despedido a trabajadores excelentes de un día para otro por un calentón del jefe.
- La mochila austríaca no es indemnización. La empresa está obligada a contribuir a la mochila de todos los trabajadores, sean o no sean despedidos, con lo cual se convierte en un coste social más por trabajador (un 1,53%), pero no desincentiva el despido ni indemniza al despedido. Es un dinero que todos los trabajadores tienen por igual, sean o no despedidos, con lo cual no se está "resarciendo de un daño o perjuicio" (la definición de indemnización) al despedido. Cómparese además las cantidades: en España 20 días por año trabajado suponen un 5,5% del salario anual. En Austria la cantidad es de un 1,53%. Y nótese una gran diferencia: en caso de finalización de contrato (cosa que ya se sabía de antemano) también se puede disponer de ese dinero, ¿es eso una indemnización?
- La mochila austríaca no es liberal. Es un sistema pintado de "liberal" cuando es lo peor de dos mundos: el Estado obliga por ley a todos los empresarios a derivar un 1,53% del salario de cada empleado a otras entidades privadas (las Vorsorgekassen) que se dedican a la inversión, con la excusa de que "es por el bien del trabajador".
En el folleto mencionado dan la gran noticia de que 100€ aportados a tu mochila en 2003 se convirtieron en 154€ si dispusiste de la mochila en 2017. Lo que no dicen es que si los hubieras invertido tú en un fondo indexado S&P500 (el primero que he mirado) hubieras conseguido 315€. Adivina quién se ha quedado los 161€ que faltan.
Ya me dirán ustedes qué diferencia hay entre el complejo sistema actual, y obligar a pagar un 1,53% más directamente a cada empleado para sus "contingencias" y que haga con ese dinero lo que quiera. La mochila austríaca es tratar a los trabajadores como niños a quienes la empresa les mete unas monedas en la hucha cada mes porque no saben ahorrar un 1,53%. Hucha que les guarda un tercero y se la devuelve más tarde con con una rentabilidad muy inferior a la del mercado. A cambio, las Vorsorgekassen tienen clientes de inversión que en la vida real jamás tendrían (los austríacos son tremendamente aversos al riesgo) y los empresarios pueden despedir libremente.
Desde mi punto de vista el sistema de la mochila austríaca se ha utilizado precisamente para eso: para despistar y edulcorar. Como decir "contribución del 1,53% extra por empleado para transferir a empresas de inversión de amigotes del gobierno a cambio de despido libre" queda mal, se ha introducido el nombre de "caja de contingencia" (en Austria) o "la mochila austríaca" (en España), que queda políticamente muy bonito (y exótico).
Dejen, dejen, que como ya hice una vez, denme la mochila a mí, que ya la llevo yo, gracias...
Saludos.