30 August 2011

De lo que publica la prensa a la realidad. De cuentos de hadas y de autoestima.


O cómo nos gustan los titulares sensacionalistas, las historias personales y los cuentos de hadas. O cómo la prensa nunca se retracta de sus errores ni cuenta la verdad.

La noticia de la prensa generalista: "Un niño de 13 años puede revolucionar la energía solar: El niño Aidan Dwyer ha conseguido aumentar hasta en un 50% el redimiento de las células fotovoltaicas. El adolescente ha aplicado un famoso modelo matemático del siglo XIII y se ha inspirado en la disposición de las hojas de los árboles para cambiar la orientación de las células fotovoltaicas".


Protagonistas: un niño de 13 años + una arcaica fórmula (empieza bien). Desarrollo: un niño, sin recursos, en una tarde de ocio, se pone a jugar con unas células fotovoltaicas e, inspirado por la naturaleza, encuentra una disposición que supera en rendimiento (¡nada menos que en un 50%!) a la disposición que se usa actualmente. Moraleja implícita (la morbosa, la que gusta): un niño curioso es más inteligente y avispado que hordas de científicos e ingenieros que han trabajado en ello durante años. ¿Quizá así justifiquemos que vivan todavía más en precario?

Ahora bien, ¿quieren conocer la realidad? Pues lean esto: "El correcto experimento fallido de Aidan Dwyer" (vía Amazings), donde se explica el fallo experimental cometido por el niño, que invalida totalmente el titular.

Coincido totalmente con el artículo. El chico es una maravilla, sin duda, y su inquietud y curiosidad encomiable, no le resta mérito en absoluto ni tiene ninguna culpa... así como todos los aficionados han realizado y realizan labores magníficas, en ocasiones superando a los profesionales. Pero no ha sido el caso.

Y, ¿qué hay de la prensa? ¿en qué lugar deja a la ciencia con estos titulares dignos del "Cosmopolitan" sin ninguna rectificación posterior? ¿Por qué no añadir el titular: "Olviden el titular de ayer, el niño cometió un error experimental garrafal propio de su inexperiencia"? ¿Basta con poner en el titular "un niño de 13 años *PUEDE* revolucionar..." para cubrirse las espaldas? ¿Qué noticia es un "puede"?

¿No están ustedes ya hartos de historias y recetas mágicas, de gurús y de cuentos chinos? ¿Por qué siguen leyendo la prensa tradicional? ¿Por qué asumen que el resto de las noticias son ciertas y fiables (economía, política, sociología...)?

Si quieren entretenerse con algo, les hago algunas preguntas... ¿Saben ustedes exactamente qué es un gen? ¿No les asombra la reproducción de los seres vivos? ¿Saben realmente cómo funciona? ¿De verdad creen que entienden la teoría de la evolución? ¿Saben por qué el cielo se ve azul y no negro?

Déjense de gaitas, de Punsets y de chorradas. Echen un vistazo a estas clases magistrales de Richard Dawkins (7, nada menos) y tendrán entretenimiento e historias interesantes para maravillarse y disfrutar unos cuantos años, si no para el resto de sus vidas. ¿No les aburre a ustedes ya la historia del Santo Grial y de cenicienta?

No compren basura, no la divulguen. Todos, absolutamente todos los titulares de ese estilo esconden una gran mentira y simplificación de fondo. Ni Edison descubrió la bombilla, ni Newton la gravedad por casualidad, ni Einstein desarrolló sus teorías un día de aburrimiento en una servilleta. Y si no me crean, léase este libro"the myths of innovation", que aunque habla en principio de innovación, muy bien puede aplicarse igualmente a los descubrimientos científicos, de los cuales también trae algunos ejemplos de grandes mitos.

Y luego algunos se extrañan de por qué Pérez-Reverte escribe con el estilo que escribe, y la gente se ofende porque llama "tonta del culo" a una persona que dirige un Ministerio y no sabe hacer la o con un canuto, cuyas decisiones les afectaran a ustedes enormemente. No me extraña que esté hasta los mismísimos de tanto cantamañanismo. Y no olviden que, como también Pérez-Reverte nos recuerda, los héroes se sientan a nuestro lado, pero nadie escribe sobre ellos. Lo mismo que los grandes cerebros.

Dejen de compararse con ellos y alabarlos tanto y váyanse a hacer deporte y a leer un poco, háganme el favor. Qué manía con tanto sensacionalismo y tanta historia.  Me gustaría que vieran ustedes a ese catedrático de matemáticas hacer unas cuentas de estadística básica, a esa diva una mañana nada más levantarse, o a ese director de banco sin su traje y su gomina.

Igual hasta se querían un poco más a sí mismos y dejaban de impresionarse por tonterías.

05 August 2011

La penas con pan son menos


Con este post termino la serie sobre Punset. Ya poco me importa saber si es un divulgador o un divagador, ni voy a volver a pedirle que se calle. Simplemente voy a prepararme un sandwich y a disfrutar de la vida.



Saludos.

PD: Gracias Pachi.

PD2 (actualización 12/1/2012): ¿Es legal el anuncio de Punset?