Hay otra cosa que es sagrada y de la que no estaría mal aprender de los americanos (y de otros lugares): los contratos escritos son sagrados. Romperlos unilateralmente no es sólo un asunto legal, sino moral. En algunas universidades inglesas, se obliga a firmar un contrato al alumno con un código de conducta (del estilo "no copiarás en los exámenes"), y es suficiente para que el alumno no copie.
Aquí no. Aquí los contratos no importan nada, salvo para perjudicar al cliente. Viene esto a cuento de que mi compañía telefónica se anunció con llamadas gratis indefinidas entre teléfonos de la misma compañía y así logró un montón de clientes. Posteriormente, lo limitó a una hora al día máximo. Actualmente ha eliminado esa tarifa.
Así, por el morro, y sin algún tipo de compensación o, como mínimo disculpas y explicaciones.
Saludos.
06 June 2012
Houston, tenemos otro problema. ¿Para qué sirve un contrato?
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2 comments:
Esto me recuerda que cuando firmé el primer contrato con mi "empresa", hace casi 26 años, tardó varios días en llegarme por correo interno la copia firmada. Cuando llegó, vi que habían cambiado con tipex las fechas de inicio/fin de contrato que habíamos firmado... Supe dónde me metía desde la firma de contrato :D
¿Un contrato fimrado cambiado con tipex? Desde luego la realidad supera la ficción, porque yo ni me lo hubiera imaginado :D
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