Una de las mayores preocupaciones del gobierno nacionalista del consistorio, especialmente de cara al verano y los turistas, ha sido hacer desaparecer la presencia de banderas españolas. Que no se vayan a creer que Euskadi es España o algo parecido. Ya saben. Cuestión de prioridades en estos tiempos.
Sólo hay (había) dos banderas españolas visibles para el ciudadano de a pie. La primera, en el Ayuntamiento.
Tras un tiempo rota y deshilachada y, tras ser apercibidos por el gobierno central, Bildu optó por cumplir la ley y reponerla. La bandera española se pondría. Eso sí, en vez de cambiar la existente, se optó por una solución ingenioesa: se construyó una pequeña plataforma a ras de suelo y se bajaron todas las banderas allí, de manera que ya no se ven, salvo que uno sepa donde están.
La otra bandera española visible estaba en la comandancia naval, dependiente del Ministerio de Defensa.
Ayer, casualidad o no, ya no estaba. Desconozco por qué, si hace mucho tiempo que falta, si se va a reponer, o si es anecdótico. Pero el caso es que ya no está.
Usar la picaresca para fastidiar al otro, llevar la contraria y ver quién los tiene más gordos: "te jodes, jejeje", y que todos estén pendientes del "qué dirán" (los turistas, por ejemplo). No sé si de dan cuenta, pero no hay comportamiento más español que ése. Para que luego digan que Euskadi no es España. Euskadi es demasiado española.
En fin. Es a ésto a lo que dedican el ingenio y el dinero nuestros políticos (sería interesante comprobar cuánto costó y quién se encargó de la plataforma y cambio de sitio de las banderas). Y son estas sus prioridades: las de un patio de colegio.
Sigan empleando dinero, esfuerzos y prioridades en que los turistas se enteren de que "Euskadi no es España". ¿Qué más da que lleguen en autobús a la ciudad y se encuentren con que no hay estación de autobuses desde hace décadas? Ni baños, ni taquillas, ni quioscos, ni bar, ni sitio para aparcar o cobijarse si llueve. Lo importante es la bandera.
Saludos.
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